El informe publicado por Deloitte (https://www2.deloitte.com/ar/es/pages/life-sciences-and-healthcare/articles/futuro-de-la-salud.html) sobre el futuro de la salud en América Latina deja algunos conceptos que creemos son de suma importancia para centros de salud y sus Stakeholders.
Dejamos a continuación algunos pasajes de reporte para desarrollar sobre las ideas que mencionan:
Actualmente, la industria de la salud está evolucionando hacia un modelo donde el consumidor está en el centro y los diferentes modelos operacionales de las organizaciones se rediseñen en torno a dicho actor y a sus necesidades, y esto es precisamente lo que podemos considerar como el futuro de la Industria.
Esto implica, no sólo pensar en el consumidor desde el punto de vista del paciente, sino en todo actor que intervenga con las operaciones. Aquí entra en juego el paciente, pero también personal de atención al público que recibe al paciente, personal médico propiamente dicho que ve antecedentes, historia clínica, revisa y da avance, personal de enfermería, y luego gerencia y/o administración en evaluación de reportes. En un grado superior y para el futuro, podemos pensar en staff adicional como limpieza de habitaciones o quirófano, control de stock, entes gubernamentales o de auditoría entre otros. Contemplamos todos los actores y creemos al igual que el informe, que deben estar en el centro.
Es de suma importancia destacar una diferenciación: la telemedicina no es igual a la salud virtual ni es igual el futuro de la salud. Es un componente de la salud virtual, y por defecto, de la visión del futuro de la salud. Por lo tanto, los actores del ecosistema de la salud que buscan transformarse deben tener en cuenta que la transformación hacia un modelo centrado en el consumidor no radica en digitalizar viejas formas de trabajar u operar, sino en rediseñar modelos operacionales en torno al consumidor, para mejorar su experiencia y solo digitalizar donde sea sensato hacerlo
En este ámbito es considerable destacar que si bien una cosa no es la otra, pareciera que son escalones de una misma historia. Pareciera que la telemedicina fue un paso o un aporte dentro de la salud virtual, la cual no podría tener espacio si la pensamos sola y aislada, sino que termina siendo parte de lo que consideramos como el futuro de la salud. Y hablamos de pequeños pasos o partes, porque el futuro en el futuro de salud incluimos una cantidad de actores que van mucho más allá de la telemedicina y su auge con la pandemia de Covid-19.
Lo que si consideramos, es que todo los actores deben estar incluidos y que muchos de los modelos actuales deben pasar a digitales, en principio como procesos de trabajo y luego cambiar los modelos de negocio, o aquellos que tengan posibilidades de financiamiento y tengan acceso a digitalizarse en un nuevo modelo, también podrían optar por ese camino.
Según este informe:
El futuro se centrará en el bienestar y en la medicina preventiva, las empresas que sean capaces de enseñar nuevos modelos en torno a las necesidades de los consumidores de salud y asuman nuevos roles continuarán prosperando y aportando valor en el ecosistema de la salud transformado.
Aquí queremos dejar un ejemplo en el que estamos trabajando: un paciente llega a su centro de diálisis, lo espera el médico/enfermero, cuando ingresa, pone huella digital al acceso, e ingresa, (aquí el centro ya tiene el acceso a la sala de espera). Al médico, le aparece en sala y tiene acceso a ver la historia clínica, la revisa y lo hace pasar. Un wearable mide algunas actividades corporales, otras las termina de verificar el médico. El médico ve por pantalla la “sala de diálisis” asigna en la pantalla táctil la silla donde debe ir el paciente. El paciente se sienta y pone su huella para dar el comienzo a la diálisis. (Aquí el centro ya registró la prestación para posteriormente facturarla evitando débitos por mala facturación).
El paciente se dializa, termina, se vuelven a medir las cuestiones médicas necesarias y parte a su hogar. Se sube al auto con Localización prendida y la app del centro, al llegar a la casa corta la localización, el centro ya tomó conocimiento de la distancia al hogar para verificar la distancia de traslado a facturar.
Gerencia recibo información que requiera sobre todos los recortes mencionados.
El informe igualmente recuerda que:
Esta transformación será impulsada por una mayor conectividad de datos, plataformas interoperables abiertas y seguras y una creciente participación del consumidor para realizar este cambio.
Es probable que surja en arquetipos que reemplazarán las funciones tradicionales existentes. Estos arquetipos van a estar dividido en tres grandes ramas: datos y plataformas, que serán la infraestructura fundamental que deforma la columna vertebral de datos”. “Bienestar y prestación de cuidados” ahí donde vamos a tener a los centros de salud centros de atención ya sea virtual o físico y aquellos que tengan que brindar servicios y productos adicionales Y por último están los conectores que serán aquellos que financien y aquellos que regulen.
Todo este cambio, requiere que los usuarios pacientes, puedan sentirse confiados del uso de la tecnología aplicada a la salud y lo que eso con lleva.
El informe comenta:
Como resultado, se espera que los consumidores sea cual fuera que interactúan con los sistemas lleguen a estar más conectados, empoderados y finalmente confiados y seguros para tomar un rol activo sobre su propia salud.
Se busca tener una mirada sistémica, por este motivo, todas estas modificaciones de las cuales estamos hablando se encuadran dentro de lo que se llama Quadruple Aim (Objetivo cuádruple) para la mejora de la atención médica.
En los últimos años han surgido tecnologías de la salud (Healtechs) en toda la región, como resultado una necesidad identificada no satisfecha de los consumidores. Esto no quiere decir que los líderes de Industria tradicionales deban adoptar la tecnología simplemente para digitalizar las viejas formas de trabajar sino que deberán buscar aprovechar la tecnología como una herramienta para mejorar la experiencia del consumidor y aprovechar las necesidades no satisfechas y aún por descubrir de los consumidores.
Además, las soluciones tecnológicas pueden aprovecharse para promover conexiones entre diferentes actores del ecosistema (por ejemplo asociaciones con healthtechs) para satisfacer necesidades individuales de los consumidores y dar paso a modelos operacionales transformados en un ecosistema de cuidado de la salud finalmente renovado.
De esto hablamos cuando mencionamos la inclusión de otros actores secundarios como wearables para mediciones corporales en el momento, o equipos electrónicos detectores de huella digital para ingreso y egreso, o simplemente apps para control de análisis clínicos. No tiene que ver sólo con atención al paciente sino a un conjunto de aplicaciones de tecnología que mejoren en los cuatro ámbitos que propone el Quadruple Aim
Hasta este momento un aspecto claro es que la tecnología está entretejida en cada detalle de la visión del futuro de la salud, es un facilitador y es clave para darle poder a los usuarios y rediseñar modelos de operaciones.
Estamos convencidos de que la unión entre tecnología y salud es amplia, con infinidades de conexiones y en el camino de esas mejoras, pensamos que un enfoque sistémico mejora a pacientes, médicos, asistentes y distintos actores del ecosistema.